—[una serie en la suburbe madrileña]—Crónicas (deportivas) de Mospintoles

Cocinando la noticia (2)

(Lee la entrega anterior)

Al no ver a Evaristo se dirigió a su oficina. Llamó a la puerta y la abrió. Una espesa bocanada de humo de tabaco la saludó, consiguiendo que se echara para atrás antes de decidirse a entrar.
—¡Coño!, mira a quién tenemos aquí. Pasa, Susana, pasa.

Allí estaba teniendo lugar algo parecido a una reunión. Evaristo y otros tres dinosaurios, a cual más humeante chimenea, habían enrarecido el ambiente. Sobre la mesa, un cenicero le dijo a Susana que o bien llevaban tiempo allí o bien nadie se ocupaba de vaciar aquel adminículo. O bien ambas cosas…

» El silencio y el humo del tabaco eran asfixiantes. Al menos para Susana.

—Mi fuente no ha conseguido mucha información…
—Que no se ha enterado de nada, quieres decir…

Susana respondió con un gruñido silencioso y torció el morro.
—Bueno, sabemos que el nuevo fichaje del Rayo es un alemán. Y es un jugador de calidad —lo cual no era decir nada pues a todo fichaje se le presupone calidad.
—¿Y cómo has averiguado “todo” eso, si puede saberse?
—Entre colegas debemos respetar la confidencialidad de nuestras fuentes –cortó Susana.
—Bueno… Algo es algo —convino Evaristo—. ¿Qué más sabemos o podemos saber?

La cuadrilla quedó en silencio. Las volutas de humo podían actuar como pantallas donde proyectar la memoria. De pronto Susana recordó…
—¿No dijo López que venía de Alemania cuando dio aquella rueda de prensa para atajar el rumor de los despidos masivos de la plantilla del Rayo?
—¡Es cierto! —dijo uno de los contertulios­, el jefe de Cultura y Ecos de Sociedad—­. ¿Tenemos por ahí la rueda de prensa completa?
—Era bueno saber el día exacto en que se dio esa rueda de prensa —apuntó Evaristo que comenzaba a animarse.

Tras las pertinentes consultas a agendas y ordenadores obtuvieron los datos. Escucharon el corte de la grabación en donde López comenzaba su alocución.
—Lo dice claramente, que acaba de llegar de Alemania de negociar la expansión de una de sus empresas. Jojojo. Aquí le pudo la vanidad a López. Quiso hacer ver que su actividad empresarial está en un momento dulce —Evaristo conocía bien a López, no en vano eran muchos años de observación profesional de la realidad de Mospintoles.

López pasaba por ser un tipo reservado, de los que dan poca información, o más exactamente, de los que sólo dan la información precisa, la que desean dar. El desliz descubierto por esta cuadriga les alentó a escuchar la rueda de prensa completa, por si había más pistas.

Pasados unos quince minutos, donde todos salvo Susana tomaron notas improvisadas, la rueda de prensa no arrojó más luz de la que ya estaban viendo.
—Veamos —comenzó Evaristo a fin de reordenar las informaciones de que disponían—. Hoy sabemos que un fichaje alemán de contrastada calidad está a punto de recalar en nuestro Rayo de Mospintoles. Sabemos también que López hace un mes reconoció llegar de Alemania de vuelta de unas negociaciones de expansión de sus negocios. Podríamos considerar al Rayo como una de sus empresas, y más ahora que es una sociedad anónima, por lo que no sería descabellado colegir que venía de cerrar el fichaje o al menos de apuntalarlo.

El silencio y el humo del tabaco eran asfixiantes. Al menos para Susana. Su débil hipótesis de un fichaje de calidad ahora se había convertido en un fichaje de contrastada calidad.

(Continuará…)